La realización de cualquier tipo de actividad física, nos ayuda a desconectar de la rutina marcada por el estudio, nos permite evadirnos y recargar las pilas, además, los beneficios se reflejaran no solo en nuestro cuerpo sino también en el rendimiento antes los libros, pues aumentará la capacidad de concentración y memorización.
Durante la preparación de una oposición el tiempo es un elemento muy valioso, pero no por ello debemos privarnos de dedicar entre 30-40 minutos para salir a caminar, correr, ir al gimnasio, o realizar cualquier otra actividad que nos permita descansar y nos ayude a despejar la mente.
Las personas que practican una actividad física periódica tienden a mejorar cualidades como un mejor funcionamiento del cerebro, concretamente, aumento de los niveles de concentración de energía, cambios en el cuerpo que mejoran la autoestima, y un mejor comportamiento que incide sobre los procesos de aprendizaje.
El ejercicio físico aumenta las sustancias químicas presentes en nuestro cerebro ayudando así a prevenir el deterioro cognitivo del mismo, ya que evita la degeneración del hipocampo, parte del cerebro relacionada con la memoria y el aprendizaje, y se agiliza la capacidad de pensamiento y toma de decisiones.
Son muchos los estudios que han demostrado a lo largo de los años la relación positiva que existe entre el rendimiento académico y la actividad física, dedicar algo de nuestro tiempo a realizar ejercicio conlleva beneficios, como por ejemplo:
- Libera sustancias químicas que nos hacen sentir bien
El ejercicio libera endorfinas, unas sustancias capaces de crear sensación de relajación y felicidad.
- Mejora la confianza en nosotros mismos
La actividad física es capaz de aumentar la autoestima.
- Previene el deterioro cognitivo
Aumenta las sustancias químicas del cerebro que ayudan a evitar la degeneración del hipocampo, una parte importante del cerebro relacionada con la memoria y el aprendizaje.
- Calma la ansiedad
Las sustancias químicas que se liberan durante y después del ejercicio pueden ayudar a calmar a las personas con ansiedad.
- Ayuda a aumentar la capacidad intelectual
Diversos estudios han demostrado que el ejercicio cardiovascular puede crear nuevas células cerebrales y mejorar el rendimiento general del cerebro.
- Mejora la productividad
Las investigaciones demuestran que los trabajadores que utilizan parte del descanso a medio día para realizar ejercicio son más productivos y tienen más energía que sus pares más sedentarios.
En conclusión, la práctica de actividad física será beneficiosa tanto para nuestro cuerpo como para nuestra mente, así que, ahora sí, apaga el ordenador o deja el móvil, ponte las deportivas y sal a liberar endorfinas.
